La Revolución Arquitectónica de Anahita Factory

Shahram Shir y la fusión de arte y funcionalidad industrial

En el corazón industrial de Teherán, se erige una construcción que desafía las convenciones: Anahita Factory, un proyecto de uso mixto que extiende sus raíces en la rica tradición arquitectónica iraní y se proyecta hacia la modernidad con una visión única. Shahram Shir, el arquitecto principal detrás de esta obra, ha tejido un diálogo entre el pasado y el presente, creando un espacio que no solo atiende las necesidades funcionales sino que también sirve como un bastión de la identidad de marca y la estética.

La inspiración para Anahita Factory proviene de múltiples fuentes: las líneas de la marca AnAhitA se reflejan en cada elemento del edificio, mientras que la arquitectura persa tradicional ofrece su vocabulario de formas y espacios. La estructura de truss triangular del contexto y la combinación de estos elementos dan vida a una idea coherente y singular. La resultante es una obra que no solo cumple con su propósito práctico sino que también se convierte en un manifiesto de diseño.

Con 2500 metros cuadrados distribuidos en tres plantas, Anahita Factory alberga una variedad de espacios, desde áreas de descanso para trabajadores hasta lujosas instalaciones de gestión. La tecnología de construcción se centra en la simplicidad y la eficiencia, utilizando concreto como material predominante y aprovechando un marco metálico preexistente para crear un patio central que sirve como pulmón verde y espacio de interacción social.

La interacción es un componente clave en el diseño de Anahita Factory. El patio central actúa como un punto de encuentro para trabajadores, empleados y directivos, fomentando un sentido de comunidad. La entrada principal, con su altura imponente, invita a los visitantes a un recorrido por espacios llenos de vegetación y agua, mientras que el segundo piso minimiza la jerarquía visual para garantizar la comodidad en las áreas residenciales y deportivas.

El proyecto Anahita Factory no solo representa un cambio en la estética de las construcciones industriales sino que también es un estudio en la relación entre el arte arquitectónico y el valor de marca. A través de una investigación exhaustiva, el equipo de diseño ha demostrado una correlación positiva entre la arquitectura y el aumento del capital de marca, lo que subraya la importancia de la estética y la identidad en el entorno construido.

Superando desafíos como la adaptación de una estructura metálica preexistente y la transformación de percepciones sociales sobre la arquitectura industrial, Anahita Factory se establece como un modelo a seguir. Este proyecto no solo ha enriquecido el paisaje arquitectónico de Teherán sino que también ha sido reconocido con el prestigioso Premio A' de Diseño en la categoría de Arquitectura, Edificación y Diseño de Estructuras en 2024, consolidando su posición como un ícono de diseño y funcionalidad.